Como tenía una semana vacaciones en el college, yo y mi mochila nos fuimos a Escocia. Me moría por ver la espada de William Wallace y conocer Edimburgo y descubrir por mi misma las maravillas que Nuria me contaba sobre esa ciudad.
lunes, 3 de marzo de 2008
ESCOCIA
Como tenía una semana vacaciones en el college, yo y mi mochila nos fuimos a Escocia. Me moría por ver la espada de William Wallace y conocer Edimburgo y descubrir por mi misma las maravillas que Nuria me contaba sobre esa ciudad.
CHICHESTER-INGLATERRA
Vivo en una habitación en una residencia de estudiantes en un pueblo pequeño del sur de Inglaterra. Estaré aquí hasta mediados de Abril, más o menos.
DIARIO 30-XI-2007
Subí al barco, comí un poco y cuando sentí los motores ponerse en marcha me fui a cubierta. Al lugar más alto y más cercano al puerto. Mientras me iba alejando de la isla mi cabeza comenzó a despedirse a su manera. Después de 6 meses de duro trabajo, de estar lejos de mi gente, de tanta soledad e incomprensión... Y sin duda que también lo he pasado realmente bien, pero allí arriba, con el viento de cara, manteniendo el equilibrio en aquella cubierta, me he descubierto en una pose triunfal, con una sonrisa en la cara que más que sonrisa era una mueca de maligna satisfacción. Y me he sentido tan eufórica que me han dado ganas de saltar y hacerle un corte de mangas a esas montañas de piedra negra de las que por fín me estaba separando.
LANZAROTE
8-XI-2007
Empiezo mi blog en Lanzarote, donde resido actualmente. Llevo cinco meses aquí y la verdad es que empiezo a estar algo aburrida de esta isla y tengo la extraña sensación de haberme perdido una estación entera. Aquí todavía es verano...
Llegué en un barco fabuloso y enseguida comencé a trabajar de camarera en un restaurante justo enfrente de la playa. El trabajo era agotador pero las vistas al mar y a la isla de enfrente, Fuerteventura, eran muy reconfortadoras.
Tenía poco tiempo libre pero lo aproveché bastante bien, hice submarinismo y se convirtió en una experiencia realmente asombrosa que recomiendo a todo el mundo. Iba a nadar casi cada día y por las noches me iba a un barecito al lado de casa, "The Powerhouse", de ambiente metalero a tomarme una cerveza negra mientras escuchaba encantada mis clásicos preferidos de los 80.
Después de tres meses decidí cambiar de trabajo y ahora estoy en un hotel de lujo donde he aprendido que, a veces, los clientes no son de cinco estrellas, aunque claro, el personal del hotel en ocasiones tampoco lo es. Las condiciones de trabajo no son muy buenas, lo que me obliga a hacer horas extra y vender uno de mis días libres semanales. Y así ahorrar lo suficiente para cuando esté en mi siguiente destino en Enero: Chichester, Inglaterra.